LOS FALSOS DESCALCIFICADORES.

LOS FALSOS DESCALCIFICADORES.

Al hilo de un comentario del artículo anterior dedicado a los descalcificadores me veo en la obligación de explicar una serie de hechos, para que no os puedan llevar al engaño.

Lo cierto es que estos sistemas basados en imanes o impulsos de corriente JAMAS se pueden llamar descalcificadores. Por su propia definición un descalcificador debe retirar la cal, algo que estos sistemas no hacen. El nombre correcto para estos sistemas sería el de inhibidores de  incrustaciones, porque es eso lo único que hacen inhibir las incrustaciones producidas por la cal en tuberías y aparatos.

En sus engañosos argumentos para vender unos sistemas que generalmente tienen un alto precio (alto beneficio) nos hablan de descalcificadores, para luego decirnos que no alteran la composición química del agua. Esto para cualquier persona con una mínima formación en ciencias ya nos hace ver la falsedad de sus argumentos, si fuera un descalcificador si alteraría la composición química del agua, puesto que quitaría cal y magnesio bajando la dureza del agua.

 El único beneficio de los inhibidores es el de impedir la acumulación de cal en las tuberías y aparatos. En cuanto al poder limpiador de las tuberías desconozco su efectividad, pero es posible que pueda existir un efecto de arrastre, similar al que producen los polifosfatos. Tengo la costumbre de hablar solo de lo que conozco.

El agua tratada con inhibidores seguirá dando los mismos problemas de siempre a la hora de lavar la ropa o la higiene personal, al estar la cal presente en ella. Por ello los descalcificadores por intercambio iónico (los de toda la vida) siguen siendo imprescindibles.

Si el efecto de estos sistemas fuera una descalcificación real, los sistemas tradicionales por resinas intercambiadoras y que utilizan la sal para la regeneración estarían obsoletos y dejarían de fabricarse.